“Buscan ser dueños de las cajas del Estado”, esgrimió acusando a la oposición de usar causas “nobles” como la educación y la pediatría para afectar la gobernabilidad. Sus dichos se dan en medio de reclamos internos que piden su expulsión de la UCR y críticas del sector universitario. –eldiariodecatamarca.com

En medio de fuertes cuestionamientos internos y de organizaciones estudiantiles, el diputado “radical con peluca” Francisco Monti, defendió su decisión de rechazar los proyectos de financiamiento universitario y la declaración de emergencia pediátrica y de residencias nacionales por un año, que incluía la jerarquización del Hospital Garrahan.

A través de un posteo en redes sociales, Monti acusó al peronismo y al kirchnerismo de utilizar estas iniciativas como una estrategia política para “afectar la gobernabilidad” del presidente Javier Milei, “Los mismos que golpearon a Raúl Alfonsín, Fernando de la Rúa y Mauricio Macri ahora van por Milei”, sostuvo.

Según el legislador, “las leyes que aprobaron y los decretos que rechazaron la oposición kirchnerista y sus aliados no son casualidad: son un ataque al corazón de la gobernabilidad”. Y agregó, “Detrás están los mismos oportunistas y populistas que destruyeron el país y hoy solo buscan limar al gobierno actual”.

También cuestionó lo que considera un “disfraz” de la oposición al presentarse como defensora de causas nobles, “Se dicen defensores del financiamiento universitario y de la pediatría, pero son los mismos que tienen las escuelas provinciales en ruinas, que hambrean a sus docentes y que deben sumas millonarias al Hospital Garrahan”, expresó, apuntando directamente a la Obra Social de Empleados Públicos (OSEP) como parte de los deudores del reconocido nosocomio pediátrico.

En ese sentido, el diputado afirmó, “Lo único que pretenden es ser siempre y en todo momento los dueños de las cajas del Estado y los negocios”.

Las declaraciones de Monti se dan en un contexto de tensión dentro de la UCR, donde un grupo de afiliados solicitó su expulsión por “deslealtad partidaria” y “alinearse con fuerzas ajenas y contrarias al pensamiento radical”. Además, desde la Federación Universitaria de Catamarca lo acusaron de “traicionar los valores de la educación pública” y no responder a las demandas del sector.