El Gobierno no prevé cancelar el acuerdo "fundacional" si la ley ómnibus no logra ser aprobada antes del 25 de Mayo en el Senado. Las opciones que se barajan.

El Gobierno de Javier Milei realizará el conocido como "Pacto del 25 de Mayo" en Córdoba, más allá de lo que pase con la ley ómnibus en el Senado, luego de obtener media sanción en la Cámara Baja. Con el tiempo en cuenta regresiva, y con la posibilidad de que los senadores voten el texto con modificaciones y eso obligue a extender el debate, en Casa Rosada de todas formas confirmaron que el acto se hará con "toda la gente que quiera acompañar" sus proyectos. 

El 1° de marzo de 2024, en el inicio de las sesiones ordinarias del Congreso, el presidente Milei utilizó su discurso en la Asamblea Legislativa para convocar a los gobernadores y al jefe de Gobierno porteño al "Pacto de Mayo", que lo calificó como un convenio "fundacional" para la nueva Argentina. Pero determinó que éste solo sería posible a cambio de la aprobación de la "Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" y del paquete fiscal. Los proyectos habían sido tratados durante febrero, cuando la administración libertaria no logró conseguir los consensos necesarios y decidió retirar la iniciativa mientras se votaba en particular. 

Ahora, y a pesar de esas palabras del jefe de Estado durante la Asamblea, una alta fuente libertaria confirmó que el Pacto de Mayo se hará en tiempo y forma en Córdoba a pesar de que la ley ómnibus y las medidas fiscales no logren superar el Senado. 

El Pacto se realizará, probablemente, en el Palacio de Justicia de Córdoba, ubicado en el Paseo Marqués de Sobremonte y a pocos metros de la Plaza Independencia, en la Capital provincial. Se hará en la tarde noche del 25 de este mes, una fecha emblemática para la Argentina, por ser un día en donde se conmemora la creación del primer Gobierno Patrio que permite la futura independencia de España. Cabe destacar que el horario se tiene pautado así porque antes el presidente Milei deberá participar del Te Deum en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires. 

Milei no solo puso una fecha, sino que limitó las negociaciones entre su Gobierno y los diputados, senadores y gobernadores, que desde marzo desfilan por los pasillos de Rosada para participar de reuniones que -generalmente- son lideradas por el ministro del Interior, Guillermo Francos, uno de los designados para llevar a cabo los consensos y una de las "palomas" del Gabinete del presidente, según lo definió el mismo Milei.

"Vamos a hacer el Pacto de Mayo con toda la gente que quiera acompañar nuestros proyectos", decían este jueves en Balcarce 50, confirmando algo que ya venía sonando fuerte: el Ejecutivo realizará la ceremonia más allá del resultado de la ley ómnibus en el Senado. Además, agregaron que "todos los que actuaron de buena fe" serán invitados porque, si acompañaron las nuevas medidas del presidente, no entienden por qué "no hacerlos parte de algo" que para los libertarios "es importante". 

Qué dice el Pacto de Mayo 

Milei propone en el Pacto 10 puntos que tienen como premisa reestructurar las bases de la Argentina. Entre ellos se encuentran la inviolabilidad de la propiedad privada, el equilibrio fiscal innegociable, la reducción del gasto público a niveles históricos, en torno al 25% del Producto Bruto Interno; una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos y promueva el comercio; la rediscusión de la coparticipación federal de impuestos para terminar para siempre con el modelo extorsivo actual; un compromiso de las provincias de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país; una reforma laboral moderna que promueva el trabajo formal; una reforma previsional que le dé sustentabilidad al sistema, respete a quienes aportaron y permita, a quienes prefieran, suscribirse a un sistema privado de jubilación; una reforma política estructural que modifique el sistema actual y vuelva a alinear los intereses de los representantes y los representados; y la  apertura al comercio internacional, de manera que la Argentina vuelva a ser una protagonista del mercado global. 

Las dudas sobre el Senado 

A pesar de haber obtenido la media sanción en la Cámara baja, el Gobierno sabe que en estos días -y antes de que se trate la ley ómnibus y el paquete fiscal en la Senado- deberá hacer un poroteo con los votos a favor y en contra, tal como hizo hace unos días antes de que los proyectos desembarquen en el recinto de Diputados. 

Aunque se respira un aire de confianza, el Ejecutivo sabe que tanto la ley ómnibus y el paquete fiscal se encuentran más complicados en la Cámara alta, que tiene mayoría kirchnerista y muchos legisladores que responden directamente a sus jefes políticos, los gobernadores. 

Es por ello que las negociaciones con los mandatarios provinciales no pararon desde el 1° de marzo, y Francos, junto al jefe de Gabinete, Nicolás Posse, se encargaron de tejer puentes con casi todos ellos.

Los que no aparecieron por Rosada o no recibieron la visita del ministro del Interior en sus provincias es porque se negaron a moverse de su posición. Por ejemplo, Axel Kicillof, Ricardo Quintela, Gildo Insfrán y Sergio Ziliotto son algunos de los gobernantes "talibanes". Desde el Ejecutivo saben que, a pesar de que algunas de las medidas les convienen a estos líderes justicialistas, no se pueden poner a negociar por una cuestión meramente política. 

Aún hay incertidumbre, pero el Gobierno de Milei logró meterse en el bolsillo a más de un gobernador opositor, como Osvaldo Jaldo, Raúl Jalil y Gustavo Sáenz, además de todos los del PRO. Deslizan que "el número mágico" es el 36, para que exista un empate que tendrá que saldar la vicepresidenta Victoria Villarruel con su voto. Ese sería el mejor de los casos, porque no niegan que puede haber modificaciones que retrasen el proceso de la ley y el paquete fiscal y que estos vuelvan a Diputados, aletargando el objetivo. 

No obstante, nada de ello va a trabar la iniciativa libertaria que propone reunir a todos los líderes políticos en Córdoba que pregonan el mismo objetivo que la administración libertaria, de una nueva Argentina.